Gracias 2021

Gracias 2021

Este año descubrí mi parte más obscura y rota, pero también mi parte más fuerte y luminosa.

Este año “I fell in love, but also I fell apart”.

2021 me trajo un amor tan poderoso y mágico que me hizo conectar con mis miedos más profundos, mis vacíos, mis carencias y mis dolores más añejos.

Fue tan fuerte que logró hundirme en mi propia vulnerabilidad, me mostró todo eso que aún no estaba sanado, mi niña interna que llevaba años y de hecho vidas, esperando a ser descubierta, a ser vista, a ser reconocida, a ser honrada.

Gracias 2021 porque muy amorosamente me mostraste mi sombra, mi zona más oculta, me mostraste mágicamente todas las Laura’s que aún estaban esperando a ser aceptadas y amadas.

Gracias al 2021 porque me enseñó a soltar todo aquello que me lastimaba, me enseñó a darme cuenta de que merezco todo lo que deseo, me enseñó a poner límites por encima de mis miedos, porque pude reconocer que todo eso que sucedía a mi alrededor era solo una proyección de mi misma, y pude entonces encontrar la fuerza, el tiempo y la valentía para dejar de huir de mi, y por fin pude contenerme yo sola, sin anestesiarme o evadirme en el trabajo, o con relaciones, buscando algún tipo de reconocimiento o placer externo. Me enseñó a darme amor a mi misma en forma de aceptación, silencio y quietud.

Porque sé que el amor propio será verdaderamente amor hasta que lo abarque todo, desde mis contradicciones, mis incongruencias, mis proyecciones, mi parte violenta, mi parte egoísta, mi parte manipuladora, demandante, la parte que todavía se victimiza, que se siente atacada y que tanto rechazo y tanto me cuesta reconocer y aceptar. 

Hoy que es el último día del 2021 hago las paces con todo lo que viví en este año, especialmente con las experiencias que me dolieron, con las que me hicieron conectar con esa sensación de no ser digna de amor, de cuidado, incluso de perdón, que me hicieron sentir miserable, no merecedora, llena de culpa y al mismo tiempo de tristeza, angustia y depresión. 

Este año al final logré quedarme quieta y sentirlo todo, aceptar lo que me duele, mi sentimiento de insuficiencia, de inadecuación, mi sentimiento de incomprensión, mis miedos, mi vulnerabilidad, mi propio auto rechazo, mi propia auto negación y falta de auto reconocimiento.

Porque estoy todavía aprendiendo a amarme al 100% y a darle la bienvenida a todo aquello que rechazo en mi corazón. Sigo en el camino de la búsqueda, del autoconocimiento, de recordar quién realmente soy detrás de este cuerpo, más allá de lo que califico como fracasos o éxitos, detrás de este personaje que mi ego ha creado y fortalecido a través de los años.

Así me despido de un año con profunda gratitud que me trajo tantos aprendizajes, tantas experiencias intensas, pero sobre todo un camino de profunda sanación, luz y fuerza interior que ni siquiera sabía que existía. 

Gracias infinitas al 2021 y a todos los que me acompañaron con él.

Recibo el 2022 con un corazón más abierto, más grande, dispuesto a recibir lo que venga con mayor aceptación y amor. 

Y a todos ustedes les deseo también un 2022 lleno de consciencia y amorosa aceptación.

 

Back to Top